NUEVA CLASIFICACIÓN A COPA LIBERTADORES
La positiva temporada 2005 en Primera División no pudo detener el castigo que impuso la ANFP a Deportes Concepción para el año 2006, siendo suspendido por un año de participar en el profesionalismo. Tras un prolongado litigio y con una filial compitiendo en Tercera División, el club logró participar nuevamente en 2007 en la máxima categoría.
En junio de ese año, se anunció la primera concesión del club a un grupo de inversionistas alemanes representados por el abogado Mario Munzenmayer. León de Collao S.A.D.P. formó un plantel potente para el año 2008, pero fue gracias al rendimiento superlativo de los canteranos Gerardo Cortés y Daúd Gazale que el equipo disputó por algunas fechas el liderato del torneo. Sin embargo, la concesionaria no cumplió con sus promesas y sucesivas pérdidas de puntos, más el auto despido de algunos jugadores, empañaron la campaña, que se vio interrumpida por el fin de la concesión en mayo de 2008 y un segundo castigo de la ANFP, esta vez impidiendo la participación del club en el Torneo Clausura 2008 y descendiendo al club a Primera B para el año 2009.
En 2010 se firmó nuevamente un contrato de concesión, esta vez con Fuerza, Garra y Corazón S.A.D.P., conformada por los empresarios Nibaldo Jaque, Raúl y Adolfo Sabando y el representante Pablo Tallarico. El contrato incluía como meta el retorno a la Primera División, lo que no ocurriría finalmente, luego de siete años de concesión. Sin embargo, en 2010 se clasificó a la final de la Copa Chile Bicentenario y con ello, logró un cupo en la liguilla Pre-Sudamericana 2011, donde enfrentó al futuro campeón de la Copa Sudamericana, Universidad de Chile.
La aparente tranquilidad económica ocultaba un alto endeudamiento nominal del club, que fue utilizado como fachada para préstamos recibidos desde la ANFP que no tuvieron como destinatario real a Deportes Concepción. La administración de Fuerza, Garra y Corazón S.A.D.P. fue conectada con el escándalo financiero del presidente de la Asociación, Sergio Jadue.